Fundada en 2018 bajo el liderazgo del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, la Comisión Interministerial BIM (CIBIM) ha sido un pilar fundamental para la digitalización del sector AECO en España. Su misión es coordinar la implementación del Plan BIM 2024-2030, que desde abril de 2024 hizo obligatorio el uso de BIM en todas las licitaciones públicas nacionales, un hito que posiciona a España como líder en Europa. En 2024, el 80% de las obras públicas en Cataluña ya utilizaban BIM (Generalitat), y la CIBIM está armonizando requisitos nacionales con estándares globales como IFC 4.3 y ISO 19650. Este enfoque garantiza entregables consistentes en proyectos de infraestructura, como carreteras y aeropuertos gestionados por Aena, mejorando la precisión en un 22% según tendencias del sector.
La CIBIM aborda desafíos clave, como la capacitación profesional y la interoperabilidad entre agentes del proyecto. Promueve Entornos Comunes de Datos (CDE) para centralizar modelos BIM, integrando herramientas como BCF 3.0 para gestionar incidencias en tiempo real y APIs RESTful para flujos dinámicos, lo que ha optimizado la colaboración en un 20% en proyectos alineados con sus directrices. La Comisión también impulsa la estandarización de terminologías mediante bSDD, facilitando la comunicación en proyectos internacionales.
Más allá de las normativas, la CIBIM fomenta una cultura digital que trasciende el ámbito técnico. Su alineación con la Agenda 2030 y el Pacto Verde europeo integra objetivos de sostenibilidad, como la reducción de emisiones en la construcción mediante modelos BIM optimizados. Por ejemplo, proyectos de rehabilitación energética en Madrid han usado BIM para planificar intervenciones, ahorrando un 10% en costos operativos. La Comisión colabora con buildingSMART Spain y organismos europeos para compartir mejores prácticas, fortaleciendo el ecosistema digital del sector AECO.
El impacto de la CIBIM es un llamado a la acción para profesionales y empresas. Al adoptar estándares abiertos y tecnologías avanzadas, el sector puede construir un futuro más eficiente y sostenible. La digitalización no es sólo una obligación normativa, sino una oportunidad para innovar.